La voz hablada y la voz cantada

 

La voz hablada y cantada se producen a partir de los mismos órganos pero cada una tiene sus características particulares. De ahí que tengamos que educar la voz si queremos ser artistas. Se canta como se habla, pero el control que hay que ejercer sobre los distintos órganos que intervienen es mucho mayor cuando se canta.

 

 

 

Para conocer estos matices debemos recordar las características o cualidades de un sonido: la altura (depende de las vibraciones de las cuerdas vocales), la duración (depende del tiempo que siguen vibrando las cuerdas vocales), la intensidad (está condicionada por la presión del aire) y el timbre (está ligado a la forma de las cavidades resonadoras).

 

Observa el siguiente cuadro comparativo:

 

 

Parámetros 

Voz hablada

Voz cantada
Altura Poco precisa Muy precisa
Duración

Mayor importancia de las consonantes

que las vocales

Mayor importancia de las vocales que de las consonantes
Intensidad

Poca variación: aproximadamente

40 dB

Grandes variaciones: de 40 a 120 dB
Timbre 

Aunque es necesaria una colocación

y una buena utilización de los resonadores, no hace falta tanta precisión

Es necesaria una perfecta colocación y utilización de los resonadores

 

 

La voz hablada abarca alrededor de un quinta y difiere en una octava entre hombres, por un lado, y mujeres y niños y niñas, por el otro.

De las cavidades de resonancia, la más importante es la cavidad bucal, en la cual es posible regular a voluntad la apertura y posición de la lengua, sobre todo para la formación de las vocales.

La calidad de la voz depende del número de armónicos y mejorará con un buen apoyo respiratorio.

El color de la voz estará dado por tanto por el timbre y su control será fundamental.

Cada persona tiene unas características vocales propias.